Lo hemos dicho muchas veces en estos últimos meses: la situación del PSOE no es nada sencilla y es muy probable que la actual dirección empeore aún más el momento por el que pasa. Por primera vez desde la Transición política, afronta unas elecciones en las que puede quedar superado por una fuerza de izquierdas tanto en votos como en escaños y que puede hacer estallar internamente un partido sometido a tensiones públicas desde la salida de José Luis Rodríguez Zapatero de la Secretaría General.
Si se confirman los resultados que apuntan los sondeos sobre intención de voto, los socialistas deberán tomar decisiones que, en principio, no les favorecerá. Si el PP logra el apoyo de C’s para investir a Mariano Rajoy u otro candidato como presidente del Gobierno, el PSOE deberá decidir si vota de forma negativa o se abstiene para facilitar la formación del Poder Ejecutivo.
De nuevo, Ferraz podría tener la llave para formar un Gobierno de centroderecha o explorar la vía de la izquierda. En el caso de que quede como tercera fuerza, quedan pocas dudas de que será Pablo Iglesias el que intentará explorar la posibilidad de ser investido presidente del Gobierno, una situación que podría agudizar la crisis interna del partido dado que también harían falta los votos o la abstención de las formaciones independentistas.
Junto a los problemas políticos e ideológicos, el PSOE está viendo cómo en esta ocasión no es el partido que más se parece a España, el que pivota en el centro de la cultura política del país (pese a los intentos del diario El País de enmendar a Podemos) ni la que registra una mayor movilización. Y eso se nota en el propio planteamiento de la campaña, algo errática en el objetivo de situar a Podemos y al PP en el mismo eje contrapuesto a los socialistas.
En esta campaña, como ocurrió en la anterior, la ilusión parece estar del lado de Unidos Podemos, que es el partido que está realizando actos más multitudinarios y con mayor impacto en las redes sociales, lo que puede terminar determinando el resultado de las elecciones el próximo 26 de junio, sobre todo si los socialistas no son capaces de movilizar a todo su electorado potencial.
Una buena idea: #ImagínatelosinRajoy
Poco antes del arranque oficial de la campaña, los socialistas difundieron un spot para recordar que existe la posibilidad de votar por correo en las elecciones del próximo día 26 de junio. Como señalábamos hace unos días, en política es importante saber dónde pones el foco y por qué. Así, con este spot queda claro que el interés principal del PSOE, en esta campaña, es movilizar a su electorado, muy desanimado por tres razones complementarias entre sí:
- El fracaso de las negociaciones de investidura de Pedro Sánchez
- Por la propia repetición de las elecciones
- Y, por qué no decirlo, con su propio partido por los errores propios y ajenos que hacen que hoy sea la tercera opción entre los electores en porcentaje de voto
Durante estos días tenemos dos muestras de este estado: La estrategia del Grupo Prisa nada disimulada de pedir el voto para el PSOE (bien con editoriales en El País, bien ofreciendo los micros de la Cadena SER para que simpatizantes socialistas los usen para decir por qué votarán socialista el próximo 26J. Y por la decisión del equipo de campaña del PSOE de pagar a militantes para garantizar cierta movilización y tensión durante las estas dos semanas. Que sepamos, es la primera vez que un partido opta por esta vía que normalmente suelen realizar voluntarios.
El vídeo toca la tecla de la melancolía ante el recuerdo de vivencias de las que sólo conservamos lo positivo. Y se centra en un momento concreto de la biografía humana: La juventud como el momento en el que atesoramos mayor número de experiencias memorables de cara al futuro. En este caso, se juega con dos hechos: El verano como el periodo en el que uno es más libre para hacer lo que le apetece; y el momento en el que este año se celebran las elecciones generales, durante el primer fin de semana del verano.
Así, a lo largo de 47 segundos, en 12 planos (más el que desvela el autor de la campaña y su mensaje) se desgranan sensaciones positivas que tienen que ver con el verano, las vacaciones y, en general, con prácticas que van asociadas al buen tiempo y a no hacer gran cosa. Y lo hace con un spot de buena factura que recuerda a todo el imaginario que ponía en marcha el anuncio de BMW (¿Te gusta conducir?) y que trata de llegar a todas la franjas de edad: El niño (con la sensación de bañarse) y la vejez (recordando a los abuelos a los que visitábamos durante las vacaciones).
Estamos ante un buen anuncio que, sin embargo, presenta dos problemas que tienen que ver con lo que apuntábamos al comienzo en relación a poner el foco:
- Estamos ante un spot dirigido a jóvenes. Es una voz joven la que locuta y en todo momento se adopta la posición de una persona de poca edad para rememorar experiencias que se recuerdan (y que tienen que ver con ese momento de la biografía). Ferraz sabe que sus mejores resultados electorales se produjeron cuando los electores más jóvenes votaron PSOE, algo que parece que no ocurrirá en estas elecciones, si nos atenemos a los resultados y al comportamiento del electorado según la franja de edad.
- El eslogan final, #ImagínateloSinRajoy, contrasta con el tono de las campañas en positivo que han decidido asumir tanto Unidos Podemos como el PP. El PSOE trata de señalar que su adversario es el PP (y, sobre todo, Mariano Rajoy) como si estuviéramos ante un planteamiento de la campaña en sentido clásico, es decir, con un eje izquierda/derecha. Tal y como venimos recogiendo desde hace semanas, el adversario principal de los socialistas ya no es el PP sino Unidos Podemos y la posibilidad de quedar sobrespasado en votos y escaños por la lista que encabeza Pablo Iglesias.
Desde esta perspectiva, tenemos ante nosotros un buen vídeo de campaña que, sin embargo, no se centra en el que debiera ser el objetivo de los socialistas, que siguen con un planteamiento de campaña errático.
Algunas ocurrencias
El jueves por la noche, el PSOE desveló la incógnita con el vídeo oficial con el que piden el voto para los españoles. Estamos ante un spot rodado en Getafe (la ciudad de donde procede la actual secretaria general del PSM), que parece hecho por un amateur y para el que tuvo que movilizar a los militantes socialistas a través de mensaje:
El vídeo, de 30 segundos de duración, se centra en el debate de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno y en el voto negativo de PP y Podemos a esta posibilidad. Es decir, tal y como se intenta desde hace semanas, Ferraz pone el foco en que ambos partidos son iguales porque votaron lo mismo en el Congreso de los diputados.
Frente a este movimiento, contrapone la posición socialista, con la presencia de varias personas que, de espaldas, caminan hacia un motivo floral gigante que representa la palabra «Sí». Por supuesto, estos 30 segundos vienen acompañados de un fondo musical que dura hasta la petición del voto para el PSOE, «el único sí que garantiza el cambio».
Durante este fin de semana, Ferraz también dio a conocer otro vídeo con un objetivo: Remarcar el mensaje que se maneja desde hace días en relación a Unidos Podemos y el hecho de volver a las urnas por su negativa a apoyar un Gobierno de Sánchez. El mensaje, que dura menos de 40 segundos, se cuenta de una manera muy informal, con una factura de planos muy rápidos centrados en una mujer, joven, que intenta desarmar el mensaje de Podemos de que fue el PSOE el que se negó a pactar un gobierno del cambio con C’s.
Y una perla más, absolutamente inclasificable. Dos mujeres (una joven -nicho de mercado al que se quiere dirigir Ferraz- y otra más mayor -su nicho tradicional-) acuden a una tienda de barrio, regentada por un original Don Mariano para reclamar que les devuelva el dinero por venderles un producto defectuoso, a lo que se niega el dueño de la tienda:
Tenemos muchas dudas de que estos tres vídeos consigan votos o, al menos, que se hable del PSOE o de Pedro Sánchez. Tampoco entendemos cómo alguien es capaz de dar el visto bueno a estos tres trabajos, sobre todo cuando han presentado, días antes, un spot tan bien hecho como el que invita a imaginar un futuro sin Rajoy en La Moncloa.