Dos encuestas sobre intención de voto reafirman el cambio operado en el sistema de partidos en Cataluña que vemos desde las elecciones autonómicas del pasado mes de septiembre y de las generales de diciembre. En clave autonómica, Junts pel sí sigue teniendo el liderazgo político pero la marca Podemos, en Cataluña, se asienta como la primera opción en unas elecciones generales. En Comú Podem es la única fuerza política catalana que incrementa su apoyo claramente respecto al 20D, con las dos fuerzas que conforman el soberanismo catalán en retirada, algo que queda claro sobre todo en el caso de CDC.
Otros efectos, relacionados con el debate sobre ‘el proces’ tiene que ver con la estabilidad de los resultados de las dos fuerzas constitucionalistas tradicionales (PP y PSC), lo que a su vez tiene un efecto directo en la proyección de C’s, que ha dejado de crecer en esta CCAA.
GESOP: Cataluña alimenta el granero de votos de Podemos
En Comú Podem afianza Cataluña como uno de los graneros de votos de cara a las elecciones generales del próximo día 26. Es la conclusión que se extrae del sondeo del GESOP para El Periódico publicado este fin de semana, unos resultados que coincidieron con el mitin de Unidos Podemos en Barcelona.
De nuevo, la formación que lidera Pablo Iglesias confirmó que mantiene en la calle el pulso que plantean todos los trabajos demoscópicos y reunión a 4500 personas en el acto más multitudinario de los celebrados por los partidos políticos en el primer fin de semana de campaña. Un acto que, por cierto, no tuvo apenas reflejo en la prensa escrita (más interesada en el mitin de Albert Rivera, interrumpido por un espontáneo que lanzó gritos independentistas antes de ser desalojado por la fuerza) pero sí en Twitter. Lo que ocurrió se pudo seguir en el hashtag #Somriu26J, que fue trending topic durante buena parte del sábado.
De acuerdo con los datos que maneja el GESOP, En Comú Podem, la marca con la que Unidos Podemos se presenta en Cataluña, se asienta como la primera opción política y aumenta su distancia respecto a sus competidores. Obtendrá el 27% de los votos, +2.4 puntos respecto a los resultados obtenidos el pasado mes de diciembre, y pasará de 12 a 13 diputados.
El PSC sería segunda fuerza en votos al ganar 0.4 puntos en intención de voto aunque mantedría los 8 diputados conseguidos el 20D. Los socialistas, por lo tanto, frenan la sangría de votos que sufrió por su posición ante el proceso independentista, que pasa factura a los partidos que lo capitalizaron: CDC se desploma y pasaría del 15% de representación a un 11.4% por lo que podría perder hasta tres de los 8 escaños conseguidos en las últimas elecciones (en las que, por cierto, obtuvo el peor resultado desde la restauración democrática). ERC, por su parte, se deja 0.2 puntos aunque podría mantener los 9 asientos conseguidos en diciembre.
C’s, con el 14.7% de los votos, gana 1.7 puntos y sería cuarta fuerza. Ganaría dos escaños a los 7 que tenía y también se asienta como una de las formaciones sobre las que pivotará el nuevo escenario político. Por su parte, el PP cae 0.2 puntos, una pérdida mínima que, sin embargo, podría provocar que perdiera uno de los 5 diputados que obtuvo el 20D.
En voto directo, En Comú Podem sigue siguendo la primera opción entre los electores que ya tienen decidido el voto: El 21.9% asegura que lo elegirá el próximo 26J. ERC sería la segunda opción con el voto más movilizado (13.6%), seguida de cerca por el PSC (13.1%). El 11.3% votará por C’s, el 7.6% por CDC y el 6.4% por el PP. El 15.9% no declara el sentido de su voto todavía.
En cuanto al nivel de fidelidad que mantienen los partidos ante las elecciones, los datos explican por sí solos la estimación de voto. CDC conserva sólo al 53.8% de sus votantes, con un 24.7% que votará otra opción política (el resto, previsiblemente, pasará a la abstención). El PSC mantiene al 68.6% de sus votantes (el 17.8% también cambiará de voto) y C’s al 72.22 (con un 10.2% que variará el sentido de su voto).
ERC conserva al 73% de su electorado (el 11.1% cambiará) y En Comú Podem convence a casi 8 de cada 10 votantes (7.2% variará su papeleta). El PP es la formación que mantiene mayor nivel de fidelidad entre sus votantes (80%, con un 8% que votará por otro partido) aunque este dato debe contextualizarse en la sangría de votos que viene sufriendo en todos los procesos electorales celebrados desde 2012.
El GESOP plantea estos datos a partir de un trabajo de campo compuesto de 800 entrevistas realizadas entre los días 3 y 6 de junio. En esta ocasión se interesa por los liderazgos, con datos curiosos que nos vuelven a indicar cierto cambio en los incentivos que los ciudadanos tienen para votar. Desde la irrupción de las nuevas formaciones, con una parte importante de dirigentes que no han tenido trayectoria política profesionalizada, los votantes parecen priorizar la marca del partido sobre la persona que dirige el proyecto, al menos en relación a los proyectos de C’s y las marcas derivadas de Podemos.
Así, los cabezas de lista de los dos partidos que tendrán los mejores resultados aparecen como los mejor valorados. Así, Xavier Domenech, de En Comú Podem, aprueba con un 5 (5.9 entre sus votantes) y Gabriel Rufián, de ERC, se queda en el 4.9 (6.6 puntos entre los suyos).
Sin embargo, vemos cómo el candidato de CDC, Francesc Homs, obtien e mejor valoración (4.6, que se transforma en 6.1 entre sus votantes) que Juan Carlos Girauta, el número 1 de C’s por Barcelona, que se queda con un 3 (5.5 entre los suyos). Girauta, por cierto, es también el candidato menos conocido por los electores (sólo lo reconoce el 40.8% de los votantes), con poco más del 50% que reconoce a la cabeza de lista de los socialistas o a Rufián.
A pesar de los resultados del PSC, Meritxel Batet es la cuarta en valoración (una puntuación de 4, que se convierte en 5.1 entre los electores socialistas, la puntuación más baja que una dirigente obtiene entre su base electoral). Por su parte, Jorge Fernández Díaz cierra la lista con una puntuación de 2.6 que suma casi 4 puntos entre los votantes del PP.
GAD3: En Comú Podem gana 4 puntos respecto al 20D
En Comú Podem gana claramente las elecciones generales en Cataluña sacando casi 13 puntos de intención de voto a su inmediato rival (ERC) y, sobre todo, ganando proyección. La marca Podemos en Cataluña obtendría el 28.4% de los votos, casi 4 puntos más que en el 20D, lo que se traduciría en que podría pasar de 12 a 13-14 diputados. Éste es el principal resultado del sondeo de GAD3 para La Vanguardia que sitúa a ERC como la segunda fuerza con el 15.7% de los votos (-0.3 puntos respecto al 20D), lo que podría hacer que perdiera uno de los 9 diputados que obtuvo en la anterior legislatura.
Como apuntábamos al comienzo, la buena noticia para el PSC y el PP es que han dejado de caer en intención de voto. Los socialistas, a pesar de los discursos que llegan desde el PSOE andaluz, se queda en el 15.1% de los votos (-0.6 puntos respecto al 20D) y podría perder un diputado. En el caso del PP, gana 0.7 puntos en intención de voto y podría sumar un escaño a los 5 conseguidos hace medio año.
En medio de estos extremos encontramos a CDC, el partido que integra Junts pel sí, que se hunde en intención de voto (pierde 3 puntos y hasta 2 escaños), y a C’s, que ha dejado de crecer electoralmente al ritmo que nos tenía acostumbrados. Obtendría el 13.2% de los votos aunque este resultado podría traducirse en un escaño más.
El sondeo, a partir de 800 entrevistas realizadas entre los dáis 13 y 16 de junio, plantea la distribución de los escaños por provincia y, de nuevo, vemos cómo Tarragona y, sobre todo, Barcelona, son las dos circunscripciones en las que existe mayor proporcionalidad en la distribución de escaños (no así en Lleida y Girona).
En Comú Podem logra representación de nuevo en todas las provincias, con mayor incidencia en Barcelona (10-11). Lo mismo se puede decir de ERC (4-5 en Barcelona y hasta 2 en Girona) o CDC (3 en Barcelona, 1-2 en Girona y uno en Tarragona y Lleida). El PSC podría obtener representación también en Lleida (provincia en la que C’s no figura en las quinielas). C’s sí podría tener representaciónen Girona.
El 65.4% cree que el PP ganará las elecciones generales aunque cuando se pregunta por las preferencias, el 25.5% señala a Unidos Podemos y el 14.9% al PSOE (un dato demoledor si tenemos en cuenta la relación estrecha entre los buenos resultados de los socialistas en Madrid y unos buenos resultados en Cataluña).
Así, cuando se pregunta a quién se prefiere como presidente del Gobierno, no extraña que el 20.3% mencione a Pablo Iglesias y el 17.7% a Pedro Sánchez. Sin embargo, destaca sobre todo el 33.4% que señala que prefiere que ninguno de los citados sea el próximo presidente del Gobierno.
En cuanto a la valoración de liderazgos, Pablo Iglesias es el líder nacional mejor situado con un 3.7 de puntuación (5.8 entre los de En Comú Podem), seguido de Albert Rivera (3.5, a pesar de su origen catalán, que llega al 6.4 entre los electores de C’s y al 5.6 entre los del PP) y Pedro Sánchez, con un 3.4 (5.8 entre los suyos). Mariano Rajoy obtiene un 2.4 de puntuación (7.8 entre sus votantes), sólo superado por Jorge Fernández Díaz, el líder peor valorado con un 2.1 de puntuación (6 entre sus votantes).
Entre los aspirantes catalanes, Gabriel Rufián es el mejor situado con un 4 de puntuación (6.3 entre los electores de ERC y 5.4 entre los de CDC), seguido de Xavier Doménech (4, 5.6 entre sus votantes) y de Francesc Homs (3.8, que llega al 6.8 entre los votantes de CDC y al 5.4 entre los de ERC). Meritxell Batet alcanza el 3.4 (siendo la única candidata que suspende entre sus votante) y Juan Carlos Girauta se mueve en el 3 de valoración (5.2 entre sus electores).
Cuando se pregunta por los incentivos para acudir a votar el próximo 26J, el 30.1% señala que lo hará pensando en el balance económico; el 25.3% tendrá en cuenta los casos de corrupción; el 20.1% cita las medidas de regeneración política y el 16.9% señala que votará pensando en el apoyo a la independencia de Cataluña.
En cuanto al estado del proces, el 75.7% sigue respaldando que se convoque el referéndum para que los catalanes decidan el encaje de Cataluña en el Estado español y el 48.4% votaría sí a la independencia. Un porcentaje consistente en el tiempo convenientemente aparcado durante estos meses en los que apenas se ha prestado atención desde Madrid a las señales que siguen llegando desde Cataluña:
El 65.2% señala que el futuro Gobierno de España y el Govern deberían negociar próximamente sobre el encaje de Cataluña en España aunque eso suponga aparcar la reivindicación independentista. Si se pregunta por las posibles salidas, el 44.8% señala la reforma de la CE para reconocer las demandas de los catalanes; el 26.2% apostaría por la independencia pese a todo; el 6.3% considera que no haría falta una reforma constitucional sino interpretar de forma distinta el texto; y el 10.7% asegura que el actual modelo ha resuelto adecuadamente el encaje de Cataluña en España.