Nueva entrega del sondeo de NC-Report para el diario La Razón, que se ahorra eufemismos: Si volviera a haber elecciones generales, la suma de los resultados de PP y C’s permitiría desatascar la situación de bloqueo político en la que vive el país desde las elecciones del 20 de diciembre de 2015. Los ‘populares’ se convierten en el único partido que saldría beneficiado electoralmente de la situación de parálisis institucional, con un avance de casi 2 puntos en apenas unas semanas.
De acuerdo con los datos que maneja la empresa demoscópica de cabecera de La Razón, el PP obtendría el 34.8% de los votos, +1.8 puntos respecto al resultado del 26 de junio y +0.7 respecto al último sondeo de NC-Report publicado, y pasaría de 137 escaños a una horquilla de entre 142 y 146. Así, a Génova casi le bastaría con sumar los escaños de C’s para volver a ocupar el Palacio de la Moncloa. El partido que lidera Albert Rivera conseguiría el 12.1% de los votos (casi un punto menos que hace unos meses y un resultado prácticamente idéntico al de hace un mes) y se movería en los 30 y 31 escaños. En las horquillas máximas de ambos partidos, un hecho que, como hemos señalado otras veces, es improbable debido a la transferencias de votos entre ambas formaciones, sumarían 177 escaños; en las mínimas, 172 diputados:
Con un supuesto de participación del 60.1%, -6 puntos respecto al dato registrado el 26J, el PSOE se asienta como segunda fuerza con el 22.4% de los apoyos (-0.2 puntos respecto al 26J y respecto al último sondeo de NC-Report publicado), por lo que parece que el papel de firmeza exhibido por Pedro Sánchez en la investidura de Mariano Rajoy no le pasaría excesiva factura. A pesar de moverse en el mismo porcentaje de voto, los socialistas podrían dejarse hasta 3 asientos en el Congreso.
Por su parte, Unidos Podemos pasaría del 21.1% de los votos a un supuesto de 20.7%, lo que se traduciría en 67-70 escaños, es decir, hasta cinco menos de los que tiene en la actualidad. Es decir, y de acuerdo con la estimación de NC-Report, a partir de 1000 entrevistas realizadas entre los días 29 de agosto y 3 de septiembre, a Unidos Podemos tampoco le pasa una factura importante el bloqueo actual y sólo pierde 0.3 puntos si lo comparamos con la estimación realizada a finales de julio.
En voto directo, el dato que llama más la atención es que casi 4 de cada 10 votantes pasarían a la abstención. Entre los que sí ejercerían el derecho al voto, el 20.7% votaría por el PP mientras que los datos de PSOE y Unidos Podemos son muy parecidos: 13.3% en el primer caso y 12.3% en el segundo. C’s cae al 12.3%, un dato prácticamente idéntico a la estimación de voto final que realiza NC-Report, que habla, sobre todo, de un techo electoral evidente.
Si observamos las transferencias de votos, vemos que se empiezan a corregir algunos de los flujos de los que hablábamos hace un año: Los partidos tradicionales comienzan a recuperar voto que se fue a las nuevas formaciones y, entre los votantes de estos partidos, una parte importante optaría por la abstención en el caso de que hubiera nuevas elecciones.
De esta forma, el PP es el partido que mayor porcentaje de fidelidad recoge: El 89.7% de sus votantes volvería a repetir el sentido de su voto; entre los que no, el 8.4% se iría a la abstención y el 1.4% a C’s. En el caso del PSOE, el 84.9% repetiría voto, con un 10.7% que se abstendría y un 1.8% que se iría a C’s. Unidos Podemos es el segundo partido con mejor dato de fidelidad: El 86.6% repetiría voto, con un 6.5% que se abstendría y un 3.4% que votaría por los socialistas. Por último, C’s es la formación con menor grado de fidelidad (75.1%) y la formación que mayor votos pierde de cara a la abstención (14.1%) y a otro partido (el 9.5% votaría por el PP).
En términos de comportamiento electoral según el factor edad, volvemos a tener datos que nos suenan de otros estudios electorales:
- Los votantes menores de 30 años son los que manifiestan mayor tendencia a la abstención (47.7%) y al apoyo a Unidos Podemos (14.8%). El PSOE aparece como la segunda fuerza en este grupo de edad (11.6%), con el PP en el 11% y C’s en el 7.1%. Por lo tanto, parece que Génova comienza a recuperar peso en esta franja de edad, a lo que podría ayudar un candidato diferente a Mariano Rajoy.
- Los votantes de entre 30 y 44 años votarían preferentemente a Unidos Podemos (16.3%) y al PP (15.6%), que adelanta a los socialistas (11.8%) en este grupo de edad. El 43% se abstendría.
- Entre los 45 y 64 años, la preferencia por el PP ya es clara (22.7%), seguido del PSOE (13.6%) y Unidos Podemos (11.5%). C’s convence al 7.4%. El 37.2% optaría por la abstención.
- Los mayores de 65 años, como viene siendo habitual, se decantan claramente por el PP como primera opción (29.6%), con el PSOE en el 15.6% (su mejor dato). Unidos Podemos obtendría el 7.4% de los apoyos y C’s el 6.6%. Este grupo de edad sería el más incentivado para acudir a votar.
Más allá del dato de participación, sorprende enormemente que, en esencia, los resultados de NC-Report coincidan tan poco con las opiniones y hartazgo que manifiesta la ciudadanía en cualquier conversación que verse sobre la situación política del país. Veremos si los próximos procesos electorales en Euskadi y Galicia contribuyen a afinar un poco más los escenarios que proponen las empresas demoscópicas.