La Gestora del PSOE trata de recuperar el control del partido

Siguen los movimientos para que los críticos a Pedro Sánchez recuperen el control de un partido cuya crisis orgánica (ya no digamos ideológica) está muy lejos de estar solucionada. El lunes, la Comisión Gestora del PSOE confirmó a Antonio Hernando como portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, cargo que ya ostentaba con Pedro Sánchez en la Secretaría General, y cambió las caras de los portavoces en el Senado y en el Parlamento Europeo: Oscar Lopez será sustituido por Vicente Álvarez Areces y Ramón Jáuregui toma las riendas en sustitución de Iratxe García.

Es el último de los movimientos ejecutados por la Gestora socialista a la espera de que se convoque oficialmente el Comité Federal del que tendrá que salir la posición oficial del partido ante la posibilidad de una nueva investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Se baraja que esta reunión se convoque los próximos días 22 y 23 de octubre, como la última ocasión para evitar repetir elecciones generales en diciembre.

El motivo de este retraso, el debate de fondo que Sánchez trató de priorizar durante su encastillamiento en Ferraz:  Una vez eliminado el factor Pedro Sánchez, que pasa unos días de vacaciones en Los Angeles con su familia, el PSOE ha de poner sobre la mesa el motivo que, según el secretario general dimitido, llevó a la rebelión interna del aparato del partido contra su líder: La posibilidad de que una abstención facilite la investidura de Rajoy y desbloquee la situación política del país.

En este punto, se confirma que las aguas no bajan tranquilas en la sede de Ferraz , con las divisiones que ya se vislumbraban con anterioridad: La del presidente de la gestora, Javier Fernández, y de otros destacados dirigentes (como Susana Díaz y el socialismo andaluz) y la de los que defienden que el partido debe votar no para evitar que el PP de Rajoy llegue al poder (sobre todo tras días en los que se conocen más datos sobre la manera en la que eludían el control del Tribunal de Cuentas).

En estos momentos, pues, confluyen tres posiciones claras en un partido que demuestra, día a día, ejemplos de crisis interna profunda:

  • La de los partidarios de la abstención, que, por pura lógica, están en minoría. En caso contrario, es posible que el Comité Federal ya se hubiera celebrado y se hubiera refrendado así la posición oficial del partido.
  • La de los que defienden que el partido no debe abstenerse, lo que ha motivado, por ejemplo, que Fernández haya renunciado a reunir al Comité Territorial para verse personalmente con todos los secretarios generales regionales.  Cabe destacar la posición del PSC, que insiste en que no acatará la disciplina de voto en el caso de que el Comité Federal decida abstenerse en la votación de la investidura de Rajoy.
  • Los sanchistas y afines, que prosiguen sus movimientos para reunir firmas contra la constitución de la gestora y campañas en Twitter como #MilitantesEnPie, que insisten en victimizar a Sánchez para preparar una vuelta heroica. No parecen nada heroicas las filtraciones de conversaciones de la reunión del Comité Federal que acabó con la salida de Sánchez de la sede de Ferraz, con planos que indican que los que grabaron dichas conversaciones estaban muy cerca de los protagonistas. Es significativo, por cierto, que este tipo de informaciones se estén publicando en medios como eldiario.es, que parece haber descubierto a Sánchez hace apenas unas semanas.

A falta de lo que ocurra con el tercer sector, que seguramente volverá a estar muy operativo cuando se convoquen las primarias para elegir secretario general, la atención se pone entre los partidarios y detractores de abstenerse ante la investidura de Rajoy. Sobre todo por los efectos que ello tendría ante una legislatura en la que Unidos Podemos podría explotar el argumento de ser la única oposición al PP (si logra frenar sus propios problemas internos) o en el estado en el que el PSOE podría afrontar unas elecciones generales en diciembre. Sería demoledor, para las intenciones de Sánchez, que la persona que encabezara la lista socialista obtuviera mejores resultados que él el pasado 26 de junio.

Y todo ello mientras se trata de reconstruir mínimamente un partido desde el realismo político: No habría que olvidar que el PSOE, sobre todo, es una organización política de tipo leninista (como la mayoría de los partidos políticos existentes, por otra parte) y que aunque la militancia pueda decidir con su voto la elección de los cabezas de lista, las listas se aprueban en Ferraz. Eso puede explicar cómo los dirigentes más vinculados al sanchismo han comenzado a rebajar el tono de sus críticas: En caso de ir a elecciones, podrían no ser parte de las listas del PSOE y esa constatación, para muchos, es más contundente que la defensa cerrada de un liderazgo tan débil como el de Sánchez.

Ese realismo político, por cierto, es lo que podría estar detrás de la elección de Antonio Hernando, portavoz del «no es no» sanchista a Rajoy, que podría tener el mérito de defender precisamente la abstención si el Comité Federal así lo aprueba. Una manera de tender puentes y simbolizar que las decisiones del partido se toman de forma colegiada y no en un órgano, como la Ejecutiva federal, hecho a imagen y semejanza del secretario general de turno.

CODA. Según un sondeo del Instituto DYM para elconfidencial, en el caso de haber nuevas elecciones, el 59.8% de los votantes de izquierdas (28.6%) y centroizquierda (31.2%) preferiría que la lista del PSOE estuviera encabezada por Pedro Sánchez. Ante la posibilidad de que la elegida fuera Susana Díaz, el apoyo cae al 17.6% en este grupo de votantes y se dispara al 44.6% entre los votantes de derecha (20.1%) y centroderecha (24.5%), electores que, por lógica, no votarían por ella en las urnas. Si incluimos el sesgo del voto, el 38.9% de los votantes del PSOE preferiría a Sánchez frente a Díaz (23.9%).

capturadym

El sondeo, realizado a partir de 1132 entrevistas recopiladas entre los días 26 de septiembre y 6 de octubre, es decir, en plena crisis interna del PSOE, recoge cómo Pablo Iglesias es el candidato favorito entre los electores de centroizquierda (38.4%) e izquierda (49.4%), con un apoyo del 51.5% entre los suyos. Mariano Rajoy es el preferido para el 31.3% de los votantes del PP (con la posibilidad de que sea Soraya Sáenz de Santamaría la número 1 el apoyo se resiente levemente) y Albert Rivera es el candidato indiscutible entre los electores de C’s (87.7%)

CODA 2. Enric Juliana aportó datos en La Vanguardia sobre la negociación que habría acelerado la decapitación de Sánchez: «El círculo de Sánchez tenía a punto un documento programático de tres folios, para someterlo a la consideración de Ciudadanos, Podemos, el Partido Nacionalista Vasco, el Compromís valenciano y los soberanistas catalanes, preferentemente la antigua Convergència Democràtica. Sólo el secretario general y dos o tres personas más de su equipo conocían el contenido exacto del documento, que se inspiraba en el manifiesto electoral socialista para las elecciones generales del pasado 26 de junio».

Acerca de llegalaultima

Politóloga y periodista en transición
Esta entrada fue publicada en Pedro Sánchez, PSOE, Sondeos. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.