El movimiento político y de partidos políticos que se confirmó en las elecciones generales de 2015 parte de un supuesto: los dos partidos que han protagonizado la vida política en España desde la Transición política aguantan mejor de lo esperado la aparición de nuevas formaciones políticas. La conclusión, que es un hecho en el caso del PP respecto a C’s, comienza a plasmarse también respecto al PSOE. A pesar de los problemas que afronta el partido, su principal rival ideológico no consigue sobrepasarle y convertirse en la principal fuerza de referencia del centro izquierda.
A grandes rasgos, éstas son las principales conclusiones que arroja el barómetro mensual de Celeste-Tel difundido por eldiario.es que, a partir de datos recogidos a comienzos de mes, ofrece varias lecturas interesantes: Parece que al PP le cuesta avanzar en términos de intención de voto mientras que la pugna entre PSOE y Unidos Podemos este mes cae del lado de los socialistas, con C’s cayendo también algo.
Con el 35.9% de los votos, el PP volvería a ser el partido más votado en unas elecciones generales. Supone un avance de casi 3 puntos respecto a los resultados registrados en los comicios del 26 de junio del año pasado y la novedad es que conseguiría el mismo porcentaje de voto que le asignó Celeste-Tel hace un mes. Este resultado se plasmaría en 149-152 diputados, es decir, hasta 15 más respecto a los que tiene en la actualidad.
En el mes de diciembre, Unidos Podemos logró sobrepasar al PSOE en intención de voto. De acuerdo con los datos de este mes, los socialistas recuperan su lugar como la principal fuerza de la oposición con el 20.7% de los apoyos (-2 puntos respecto al 26) y una horquilla de entre 76 y 79 escaños, una atribución más que razonable si tenemos en cuenta la situación interna del partido.
Como hemos señalado en numerosas ocasiones, se corre el riesgo de minusvalorar la importancia de unas siglas y de una organización que ha sido referencia política en España hasta la actualidad. Respecto a hace un mes, el PSOE gana medio punto, a la espera de contabilizar, próximanente, el efecto del anuncio de Patxi López.
Unidos Podemos, por su parte. se quedaría en el 20.3% de los votos, -0.4 puntos respecto al mes pasado y también por debajo del resultado conseguido en junio. Sus 71 diputados actuales se quedaría en una horquilla de entre 66 y 69 escaños, que son los que, casualmente, lograron Podemos y las confluencias en los comicios del 20D, antes del acuerdo con IU.
Por último, C’s pasaría del 13% de representación a una intención de voto del 12.4%, -0.3 puntos respecto al mes pasado. Sus 32 diputados se quedarían en una horquilla de 28 y 30 escaños, suficientes en cualquier caso para garantizar al PP la mayoría absoluta.
Otros resultados interesantes que recoge Celeste-Tel: ERC podría ganar un escaño a los 9 que tiene en la actualidad (con el 2.8% de los votos) y volvería a quedar por delante del PDeCat, que podría perder un diputado. En el caso de los partidos vascos, no habría cambios y el PNV lograría 5 asientos mientras que EH-Bildu repetiría con dos. CC también mantendría el diputado conseguido el pasado mes de junio.
En voto directo, el PP sería el partido con más voto decidido y con mayor porcentaje de simpatía (22.1%), con el PSOE y Unidos Podemos disputándose la segunda plaza: Los socialistas se moverían en torno al 16.2% y Unidos Podemos en el 16.5%. Insistimos: Malas noticias para los intereses de la formación que lidera Pablo Iglesias, sobre todo si tenemos en cuenta que en las próximas semanas veremos exhibidos los problemas internos de la formación de cara a la Asamblea ciudadana Vistalegre II.
En cuanto a la fidelidad de los electores respecto a los principales partidos, tampoco hay grandes novedadade: Las pérdidas de voto que registran todas las formaciones no son recogidas por las demás sino que ese voto desencantado va directamente a la abstención. Es decir, si el partido de turno acierta en sus recetas es posible que pueda recuperar parte de ese voto perdido, especialmente en el caso del PSOE, que tiene un 20.7% de votantes que señalan que si hoy hubiera elecciones no votaría.
El PP vuelve a ser el partido que mejor dato de fidelidad mantiene entre los suyos: El 90.3% repetiría el sentido de su voto, con un 7.1% que se abstendría y un 1.5% que se decantaría por C’s. Unidos Podemos mantiene al 79.1% de sus votantes, con un 14.7% que se abstendría y un 3.2% que votaría por el PSOE. C’s, por su parte, conserva al 77.2% de su electorado; el 11.3% señala que se abstendría y el 5.7% daría su confianza al PP. Por último, el PSOE fideliza al 72.2% de sus votantes; como apuntábamos,el 20.7% no votaría y el 3.2% lo haría por Unidos Podemos.Casualmente, existe el mismo porcentaje de trasvase de voto entre socialistas y la formación morada.