La situación política en Cataluña pivota en estos momentos sobre la eficacia de la convocatoria de elecciones anticipadas autonómicas el próximo 21 de diciembre. En este contexto, cobran especial interés los sondeos sobre intención de voto en Cataluña, con trabajos que hablan de una mayoría absoluta sólida del independentismo frente a otros que sitúan al PdeCat, ERC y la CUP lejos de la mayoría absoluta necesaria para revalidar el Govern, por lo que necesitarían el apoyo de una cuarta formación, previsiblemente Catalunya en Comú (CeC).
En este segundo grupo encontramos los datos del sondeo de Sigma Dos para el diario El Mundo, que sitúan al independentismo en los 61-65 diputados, de acuerdo con las horquillas atribuidas a ERC y el PdeCat, por lo que se quedarían a tres escaños, en el mejor de los casos, de la mayoría absoluta. La novedad, en este estudio, es el ascenso de las formaciones constitucionalistas, que podrían ganar 10 escaños a los 52 que suman en el Parlament disuelto por decisión del Gobierno central. Un ascenso del que se apro
vecharía, sobre todo, el PSC, que sería el partido político del bloque constitucionalista que habría jugado mejor sus cartas respecto al electorado catalán, quizás por su papel en la búsqueda de una solución negociada que evitara la activación del art. 155 de la CE la semana pasada.
ERC, con el 26.4% de los votos, se confirma como el partido de la coalición Junts Pel Si (JxS) que aglutinaría el favor del independentismo, haciéndose con 41-43 diputados de los 62 que la coalición tenía. Su socio de gobierno, el PdeCat, se movería en torno al 9.8% de los apoyos y 13-15 escaños, en lo que se confirma como un hundimiento en torno al partido central de la política catalana durante décadas. Entre ambos sumarían el 36.2% de la representación (-3.3 puntos respecto a 2015) y una horquilla de 54-58 diputados de los 62 que tiene en el Parlament saliente.
Por su parte, la CUP pasa del 8.2% de los votos a una intención de voto del 6.3%, que se traduce en 7 de los 10 escaños que logró hace dos años. Si se produjera una suerte de acuerdo entre el independentismo, que se antoja lejano ahora por la falta de confianza, entre los tres partidos sumarían entre 61 y 65 asientos, a la espera de, al menos, la abstención de los 13 diputados que Sigma Dos atribuye a CeC.
El partido que liderará en principio Xavier Domènech, gana 2.1 puntos en intención de voto respecto a 2012 al moverse en el 11% de los votos y 13 diputados. Un dato que debe tomarse con pinzas: La recogida de datos de las 1000 entrevistas realizadas en Cataluña se hizo entre los días 23 y 26 de octubre, antes de la explosión de Podemos por la cuestión catalana, una explosión que ha concluido con la intervención de Podem por parte de la formación en Madrid, desautorizando de paso a Albano-Fachin. Será interesante ver si esta decisión concluye con una fuga de votos del sector más partidario de la independencia de CeC a otros partidos (léase, CUP), más claros en ese sentido.
En el bloque constitucionalista se registran pocos cambios al margen de la tendencia ascendente de PSC y C’s. En el caso de la formación naranja, volvería a ser la principal fuerza de oposición con el 19.6% de intención de voto (+1.7 puntos respecto a 2015), que le haría pasar de 25 a una horquilla de 26 a 28 diputados. El PP, por su parte, se mantiene estable en su representación, con atribuciones oscilantes de 10-12 escaños.
La gran sorpresa, sin embargo, la protagoniza el PSC: En la línea del sondeo del GESOP, Sigma Dos le atribuye el 15.1% de los votos (+3.1 puntos) y pasaría de 16 a 20-22 diputados, una subida que explica por qué el bloque constitucionalista podría sumar 10 escaños a los 52 actuales en sus horquillas máximas. Un detalle que tiene importancia vital porque es posible que, además de cambios en CeC, se podrían estar dando transferencias de voto en el bloque unionista, de manera que una horquilla máxima de C’s puede traducirse en la atribución mínima al PP o al PSC, y viceversa.
Mayoría clara en Cataluña en favor del reférendum
A pesar de los datos, que se completan con 900 entrevistas realizadas en el resto del país, la realidad sobre la existencia de un problema en Cataluña es tozuda: El 75.6% de los catalanes apoyaría la celebración de un referéndum legal sobre el encaje de Cataluña en España, un porcentaje que es mayoritario en los votante de todos los partidos: Desde el 58.1% de los electores del PP que vería bien esta fórmula al 94.3% d elos JxS, prácticamente empatados con los de CSQEP. El apyo al reférendum pactado baja al 57.4% entre los españoles, con opiniones en contra de los electores del PP (-17.8 puntos en comparación con el dato catalán) y los de C’s (-22.7 puntos).
Ante la posibilidad de la independencia de Cataluña, el 33.5% de los catalanes se posiciona en contra (con la excepción de los votantes de JxS y de la CUP, con porcentajes del 76.5% y del 91.95 respectivamente). El 58.3% se posiciona en contra, algo que comparten los votantes de todos los partidos de forma mayoritaria: los que dudan más, los de CSQEP, entre los que el porcentaje llega al 71.7%. No hay dudas en el conjunto del país, con un 80.4% de españoles que no vería con buenos ojos la independencia catalana, algo que apoyan de forma clara los votantes de todos los partidos (los menos entusiastas, lo sde UP, con un 64.9% de opiniones en contra). 
Las opciones de que Cataluña se independice finalmente son claras también: El 71.5% de españoles no cre que lo consiga, algo en lo que vuelven a coincidir las bases electorales de los diferentes partidos (del 60.1% registrado entre los de UP al 86.9% del PP), un porcentaje que baja al 55.8% entre los catalanes, una opinión transversal también entre los diferentes partidos, con especial mención al 68.2% que recibe entre los votantes de CeC y que contrasta con el 90.8% que recibe entre los electores del PP. Los partidarios de que es posible la independencia catalana constituyen un 36.6% (+14 puntos respecto al dato español), con importante incidencia entre los votantes de JxS (72.1%) y, por supuesto, entre la CUP (94.4%).
Brecha entre Cataluña y el resto del país a propósito del 1-O y el art. 155
Sigma Dos pulsa esta vez la opinión de los catalanes respecto a los acontecimientos registrados en el último mes: Desde la celebración del referéndum del 1 de octubre a la detención de los responsables de ANC y Omnium Cultural, pasando por la aplicación del art. 155 de la CE aprobada por el Senado el pasado viernes.
El 67.1% considera que no se debería haber permitido la celebración del referéndum del 1 de octubre, opinión que comparte el 89.3% del electorado del PP, el 83.7% del de C’s y el 76.1% del PSOE. El 28.6% de los españoles sí cree que se debería haber permitido (66.4% de votantes de Unidos Podemos). Si nos vamos a Cataluña, el apoyo al no entre los votantes de PSC cae al 57.8% pero se mantiene alto entre los de C’s (76.9%) y el PP (91.9%). El 68.6% de los votantes de CSEQP señala que se debería haber permitido su celebración, un apoyo que supera el 95% entre los de JxS y la CUP.
En cuanto a la actuación de los FCSE para evitar el referéndum, el 24% las define como mala o muy mala decisión (51.1% de votantes de Unidos Podemos se pronuncia así), el 14.9% tacha el comportamiento de regular y el 58.1% define la actuación como buena o muy buena (84.9% de apoyo entre los votantes del PP, 72.4% entre los de C’s y 59.9% entre los socialistas). Si nos vamos a Cataluña, comienzan las discrepancias: Sólo defienden su actuación los votantes del PP (75.9%) y de C’s (56.5%), con casi -16 puntos respecto a los que opinan así en el resto del país. Las cargas son valoradas de forma negativas por los electores de la CUP y JxS, por 6 de cada 10 de CSQEP y por el 42.5% de los del PSC.
Sobre la actuación de los Mossos ese día, el 56.5% de los españoles considera que esa actuación fue mala o muy mala, el 21.3% la define como regular y el 17.4% la valora en términos positivos. En Cataluña, los datos se corrigen de esta manera: el 36% la define como mala o muy mala, el 21% como regular y el 38.9% en términos positivos (+21.5 puntos repsecto a la opinión del resto del país).
En relación a la actuación de la Generalitat, el 82.7% mantiene que está cometiendo ilegalidades, opinión que respalda más del 96% de votantes del PP y C’s, el 87.2% de los del PSOE y el 72.6% de los de UP. En Cataluña, los electores del PSC (80.8%), de PP (89%), C’s (82.8%) y de CSQEP (74.6%) opina en este sentido frente a los de JxS (66.4%) y la CUP (78%), que considera que la actuación del Govern es legal.
La detención de los «Jordis» es defendida como una decisión judicial estrict apor el 48.4% de los españoles frente al 26.6% de los catalanes que opina así. El 35.3% de los votantes españoles cree que está condicionada políticamente (59.2% de catalenes se pronuncia así). En cualquier caso, el 53.7% cree que es una decisión adecuada frente al 28% de los catalanes que lo cree. La mayoría, el 56.8%, considera que es una decisión inadecuada.
El 32.1% cree que la aplicación del art. 155 de la CE es una medida adecuada (49.1% de votantes del PP, 34.2% de los del PSOE y 44.9% de los de C’s lo respaldan) frente al 16.25 que cree que afecta a demasiadas áreas de la Generalitat (39.5% de electores de UP). el 19.1% lo considera insuficiente y el 32.6% no sabe o no contesta. En Cataluña, el apoyo a la medida se queda en el 18.8% (47.3% de votantes del PP y 45.1% de los de C’s), el 34.9% cosnidera que aborda demasiadas áreas (33.7% de votantes del PSC, 49.1% de los de CeC, 66.6% de los de JxS y 67.1% de los de la CUP). El 14.4% lo critica por deficiente y el 31.8% no responde.
El 39.8% de los españoles opina que debería haberse aplicado antes (34.2% de votantes del PSOE, 49.9% de los de C’s y 54.8% del PP se decantan por esta opción), el 20.9%, mantiene que se ha activado la medida en el momento oportuno y el 27% señala que no debería haberse aplicado En Cataluña volvemos a tener una brecha: Se debería haber aplicado antes para los votantes de PP (45.6%) y C’s (45.8%) y no se debería haber activado para los electores del PSC (49.7%), de CeC (67.9%) y, supuesto, entre los de JxS y la CUP.
Ante la posibilidad de elecciones, el 57.4% considera que debería adelantarse la convocatoria electoral en el resto del país (con apoyos de más del 70% entre todos los partidos, especialmente entre los de UP y C’s). En el caso catalán, la opción de adelantar las elecciones era comparida por el 63.9% del electorado, particularmente entre los votnates de C’s (90.8%), del PSC (82.3%), de CSQEP (74.1%) y del PP (68.8%). Vemos, por lo tanto, que el argumentario de los partidos sí se traslada en esta posibilidad a los votantes. Lo mismo sucede en el bloque independentista: El 28.6% de los votantes se declaran en contra de adelantar las elecciones, algo que comparte el 45.8% de los electores de JxS y el 66.5% de los de la CUP.
CODA. Incluimos en este punto notas sobre el sondeo de Metroscopia para el diario El País hecho a partir de 500 entrevistas recogidas el día 24 de octubre y que habla de una fractura de país de acuerdo a las posiciones de los partidos catalanes respecto a la independencia, la convocatoria de elecciones e incluso el sentimiento identitario.
El 29% defiende la idea de una Cataluña independiente (79% de votantes de la CUP, 69% de los de ERC y 47% de los del PdeCat) frente al 19% que quiere que no haya cambios de estatus (24% de los del PSC, 61% de los de C’s y 84% de los del PP) y el 46% que reclama que se reconduzca la situación con un nuevo papel de Cataluña con competencias blindadas en el Estado (77% de votantes del PSC, 39% de los de C’s) a los que hay que sumar el 91% de base electoral de CeC, 50% de los del PdeCat y 23% de los de ERC y la CUP.
El 55% se muestra en contra de una declaración unilateral de independencia de Cataluña frente al 41% que estaría a favor. Aquí vemos de nuevo la división parlamentaria por grupos políticos: entre el 93 y el 65% de votantes de la CUP y el PdeCat estaría a favor frente a los demás, que se muestran en contra (práctica unanimidad entre los electores de PSC, C’s y PP y el 79% de los de CeC).
En el caso de una consulta legal, el 44% votaría a favor de la independencia (más del 90% de votantes de ERC y CUP y 77% de los del PdeCat) frente al 48% que preferiría que Cataluña siguiera perteneciendo a España (más del 95% de electores de PSC, PP y C’s y 61%de los de CeC). Si Cataluña se quedara fuera de la UE con la independencia, el apoyo a la misma es del 43% mientras que sube el no al 51%, con la misma distribución en porcentaje de voto según el recuerdo de voto, con mención al 70% de votantes de CeC que votaría en contra en este supuesto (frente al 61% citado anteriormente).
En este contexto, el 43% opina que que unas elecciones autonómicas no van a reconducir la situación política (65% de votantes del PdeCat, 74% de los de ERC y 82% de los de la CUP) frente al 52% que señala que ésta es la vía: apoyo del 58% entre la base electoral de CeC, del 75% entre los del PP y del 82% entre los del PSC y C’s.
En cuanto al sentimiento identitario, el 44% se declara sólo catalán o más catalán que español, porcentajes que llegan al 81% entre los votnates de ERC, por encima del 90% entre los de la CUP y el PdeCat y al 39% entre los de CeC. El 46% de los ciudadanos asegura sentirse tan catalán como español, una opción que convence a más del 80% de votantes del PSC y C’s, al 75% de los del PP y al 47% de los de CeC.
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